Miguel Ángel Martínez. Tula de Allende.- Rodolfo Paredes Carbajal, alcalde de esta demarcación aseveró que no tiene caso participar en los simulacros realizados por Pemex en la Refinería Miguel Hidalgo, dado que cuando ocurre un siniestro mayor como el del 30 de julio pasado no permiten que participen las unidades de emergencia municipal. Sin embargo, dijo que esto no quería decir que en el futuro dejaran de atender a los llamados de la paraestatal, y enfatizó que siempre tendrían buena disposición a ayudar a la empresa petrolera y sobre todo asegurar que la integridad física de los tulenses permaneciera resguardada como lo habían hecho en la pasada contingencia.
Al respecto de lo anterior externo un reclamo enérgico hacia la paraestatal, ya que señaló que Pemex tiene una gran cerrazón y ni siquiera los toman en cuenta como autoridades municipales, “nos deberían de tener al tanto de lo que ocurre, es nuestro derecho”, por ello exhortó a la paraestatal a abrir más sus canales de comunicación.
En otros temas refirió que autoridades estatales, como el secretario de gobierno Fernando Moctezuma Pereda y el Secretario de Planeación Alberto Meléndez Apodaca habían estado en constante comunicación con él, por lo que permanecieron enterados “minuto a minuto sobre la situación”.
En cuanto a la reciente visita del director general de la paraestatal Juan José Suárez Coopel, aseguró que tanta es la desatención de Pemex hacia la autoridad municipal que no le informaron sobre la citada, y se enteró de esta hasta que el directivo ya se había marchado de la localidad.
Y abundó “no hubo acercamiento de su parte y yo tampoco lo busqué, es su obligación informarnos y es nuestro derecho saber las cosas”.
Por ello señaló que se estaba exigiendo a Pemex a través de gobierno estatal que dé un informe detallado sobre el estado físico de la refinería y las verdaderas causas de la anterior explosión, ya que eran preocupantes las condiciones del complejo petroquímico y que se sabía que las instalaciones de la Refinería estaban muy deterioradas.
Así mismo explicó que se está solicitando una audiencia al interior de la Miguel Hidalgo, para luego a las oficinas centrales de México, ubicadas en las calles, Torres y Sevilla, y solicitar que se nos expliquen de manera detallada qué pasó.
En ese sentido indicó que no existe un temor de que por esta presión y exigencia hacia Pemex, la paraestatal les retire los apoyos dados al municipio, pues no tiene nada que ver una cosa con la otra e insistió en tener derecho a ser informados “para nosotros a su vez informar a los tulenses”.
Afirmó también que buscará acercarse con los familiares del trabajador tulense que falleció en la explosión del pasado 30 de julio en la reductora de viscosidad, Patricio Rodríguez García, y estará al pendiente de sus necesidades.
Por otro lado dijo que en caso de una explosión mayor donde las comunidades aledañas a la Refinería como el Llano primera y segunda sección, Tultengo y Arboledas resultaran afectadas, y garantizó que la administración ya tenía previsto varios albergues, siendo que los principales serían el auditorio municipal y la duela de la unidad deportiva Tula.
Finalmente detalló que se contaba con colchonetas, colchones, mantas, agua embotellada y todo lo que se pudiera necesitar en caso de una contingencia mayor.
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